29 de marzo de 2012


''Me da vertigo el punto muerto y la marcha atrás, vivir en los atascos, los frenos automáticos y el olor a gasoil. Me angustia el cruze de miradas, la dobele dirección de las palabras y el obsceno guiñar de los semáforos, me arruina las prisas y las faltas de estilo, el paso obligatorio, las tardes de domingo y hasta la línea recta. Me enerva los que no tienen dudas, y aquellos que se aferran a sus ideales sobre los de cualquiera, me cansa tanto tráfico y tanto sin sentido, parado frente al mar mientras, el mundo gira''

26 de marzo de 2012


''Vuelvo a casa con la conciencia casi tranquila, es de noche, Madrid centro, llueve y me mojo las Nike. Camino con la sensación de aquel al que vigilan, el mp3 sin pila, jode pero es lo que hay. Bebemos de las gotas de la lluvia ácida, y saben a ciudad, brindo con ese extraño licor. Tratamos de ser buenos hasta que al final algo nos desafía, pero al final casi siempre pido todo por favor. Pruebe a conocernos la sorprenderá quizá, que cualquiera de estos kinkis tiene mejor corazón que su preciosa hija, pero tienen peor disfraz y eso es en lo que se fijan casi todas y así va. Asique por mí pueden irse lejos con su historia. Que, ¿qué haría yo si fueses tú? Me moriría. Aquí, fumamos y nos falla la memoria y aún así ¿qué harías tú si fueras yo? Te aplaudiría''

24 de marzo de 2012




No eras tú. Yo no conocí a otra persona. ¿Sabes? Me gustabas y... cambiaste. Eras romántico, cariñoso, estabas pendiente de mí en cada segundo en el que estábamos juntos. Por ti sentí mil y una cosas, mil y un sentimientos y soñé, soñé contigo cada noche. Volar no era un deseo imposible si estabas a mi lado. Tuvimos enfrentamientos, peleas, batallas, guerras... da igual como lo llamásemos, si al final de todo volvíamos a estar juntos. Reconstruimos demasiadas veces lo que un día fue un cuento de princesas en el que tú eras mi príncipe, pero ya los cimientos no se pueden volver a crear. No dan a más. Esto terminó hace tiempo, pero no lo reconocíamos. No nos engañemos, por favor. Ya no quedan cenizas de donde un día hubo fuego.

23 de marzo de 2012


No es la cantidad de hombres en tu vida lo que cuenta, sino la cantidad de vida en tus hombres 

22 de marzo de 2012

7 de marzo de 2012

Querida (?):



Simplemente quería pedirte algunas cosas:
La primera de ellas es: hazlo feliz. Hazlo el chico más feliz y afortunado del mundo, por favor. Dale todo el máximo cariño que puedas darle, aunque no llegue a ser tan grande cómo el que yo le daría. Hazlo reir, le encanta reír, los chistes malos y meterse un poco contigo. Te dirá que no tiene cosquillas, yo tardé un buen rato en descubrirlas, pero están ahí, justo en su brazo cuando le acaricias suavemente.
Su voz aún resuena en mis oidos, esa voz que antes, hasta hace nada pronunciaba mi nombre.
Si llueve no hace falta que le tapes con el paraguas, aunque se queje no le importa mojarse, por mi se empapó varias veces.
Acaríciale, dale besos en el cuello y en las orejas, y tócale el pelo, se derretirá.
Se contenta con las pequeñas cosas, los regalos no le interesan, asique no te pases de materialista, quizás yo me pasaba.
Intenta sorprenderle, te aviso de que es muy complicado, yo pocas veces lo conseguí, asique ¡suerte!.
Háblale claro, no le gustan los rodeos. Toma tú la iniciativa, siempre se quejaba de que yo nunca lo hacía.
Sé natural con él y recógete el pelo de la cara, a mi siempre se me metía en su boca cuando lo besaba, y se reía y bromeaba con que necesitaba cortármelo (pero claro yo no sé como lo tienes tú).
Y cuando vayáis a cruzar un paso de peatones, él siempre cruza en rojo, asique no te pares a decirle que no cruce, cientos de veces se lo repetí y no me hizo ni caso nunca.
Adora que lo abracen fuertemente, no lo olvides.
Cuando veas que se dispersa del lugar fácilmente, no lo dudes, le pasa algo, se le ve en los ojos, esos preciosos ojos verdes. Siempre le decía que me encantaban los ojos claros.
Joder, pero como le echo de menos. Y como le quise, y le quiero. Y como odio reconocerlo.
Cuando lo notes apagado, aunque solo sea un poco, pregúntale que le pasa, él ya puede estar muriéndose que no dirá nada, de modo que averígualo, no quiero que sufra.
Espero que lo cuides, ya que yo ya no puedo, mi momento ya pasó.
Ah, y para terminar, lo que más le gusta, lo que adora sobre todas las cosas, es verte feliz. Ver que él te hace feliz, verte reír, y que lo beses.
Bueno, creo que eso es todo.
Cuídalo y quiérelo. Por favor, nunca le dejes solo, nunca le hagas daño. No, no podría soportar verlo mal.
Vive todo lo que puedas con él, yo seguiré aquí, ahogándome en mil recuerdos y viviendo de ellos.